Con esta entrada comienza una serie en la que voy a dar en lineas generales los pasos seguidos por el Equipo de Maquetistas de Eloy para la realización de las Miniaturas desde el surgimiento de una idea hasta su culminación materializándose en Miniaturas y maquetas que van a ser expuestas formando parte de un conjunto.
La idea general de un proyecto surgía siempre de Eloy bien porque veía algo que era susceptible de ser realizado en las Miniaturas o bien porque había algo de actualidad sobre lo que quisiera hacer hincapié.
Después nos reunía a todos y nos comunicaba la idea del proyecto. Aquí cada uno aportábamos nuestro comentario según nuestra especialización en el trabajo. Además, en estas reuniones surgían ideas que, en principio, eran meras conjeturas o hipótesis acerca de determinadas cosas; como por ejemplo algunos mecanismos o algunos detalles que se irían situando de manera estratégica. Todas estas cosas se iban anotando y se ponían en práctica o se descartaban o se dejaban para un siguiente proyecto. Además durante la realización de las maquetas iban surgiendo cosas que también se anotaban y se realizaban si eran factibles. Lo lógico era ir complicando cada vez más las cosas con cada vez más detalles, mecanismos cada vez más complicados y precisos, personajes que iban surgiendo, etc. Estas realizaciones en ocasiones hacían que el tiempo se nos fuera agotando y tuviésemos que redoblar los esfuerzos a fin de cumplir con la fecha de inauguración. Pero lejos de que por esto cundiese el desánimo lo que hacía era incentivarnos. Ninguno de los miembros del equipo trabajamos nunca con desgana y si por casualidad alguien podía sentirse con menos fuerzas, Eloy, cuando subía al taller siempre nos arengaba diciendo: -"¡Tranquilos muchachos, que no cunda el pánico, que no pasa nada!"
Y, curiosamente, nunca pasaba nada, todo estaba listo para las inauguraciones.
Eloy también solía decir: "-Tenemos dos mil detalles, si faltan cuatro tampoco pasa nada, nadie se va a dar cuenta, porque solo los conocemos nosotros". La historia estaba en que de esos "dos mil detalles" al final no faltaba ni uno (doy fe de ello). Siempre daba tiempo a todo y siempre estaba todo.
En la reunión inicial también se distribuía el trabajo de lo que sería la recopilación de información, es decir el llamado trabajo de campo, fundamental para que la obra final tuviese la suficiente veracidad y la reproducción fuese exacta.
(Continuará en la entrada: LA REALIZACIÓN DE LAS MINIATURAS (1) (El trabajo de campo).
Nota: Seguramente muchos de vosotros habréis visto publicada en el blog las primeras líneas de esta entrada desde la noche del viernes día 21 a la mañana del domingo 22, esto ha sido porque a la hora de guardar el borrador, por error (no sé si mio o del sistema) subió para ser publicada. Pido disculpas por el contratiempo.
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